47 millones 327 mil 407 es el número de la semana
Ese es el total de habitantes de la República Argentina según el dato provisorio del censo nacional llevado a cabo el miércoles 18
El número, que debe interpretarse como tendencia del operativo de campo.
A él y a todos los que presentó el jueves el INDEC deben aplicarse procesos pos-censales de consistencias y validaciones una vez completada la etapa de recuperación prevista en la metodología del Censo
De cualquier manera, algunas cifras llaman la atención.
El porcentaje de Varones / Masculino: 47,05% es significativamente menor al de Mujeres / Femenino: 52,83%
La razón es simple (o no tanto) Las mujeres tienen una mayor expectativa de vida que los hombres.
Lejos está, obviamente, el mito de que por cada siete mujeres había un hombre que supo instalarse en la república argentina del siglo 19, en especial después de la participación de los primeros en las guerras de la independencia, en la mal llamada conquista del desierto y en los enfrentamientos con Paraguay.
Aunque provisorio, también llama la atención el porcentaje de personas “no binarias”. Es cierto que hoy la elección sexual puede ser legitimada a través del propio documento de identidad. No obstante, parece extremadamente insignificante el porcentaje de personas que prefieren no asumir la pertenencia a un sexo determinado: sólo el 0,12% de la población censada por la vía digital asumió tal carácter.
La cuestión no es menor, teniendo en cuenta el protagonismo que algunos sectores políticos le han asignado a la hora de ampliar derechos.
Ese porcentaje termina avalando el miserable discurso de quienes insisten en denigrar a las minorías. Lo de algunos comunicadores ya supera los límites de la xenofobia y el sexismo. Seguramente, los discursos del odio se sentirán fortalecidos frente al dato.
De cualquier manera, son datos preliminares. Incluso lo serán también los que sobre población por sexo, provincia y departamento serán presentados dentro de los 90 días
Esos datos seguramente revelarán que un altísimo porcentaje de los habitantes del país vive cada vez en peores condiciones socioeconómicas.
De hecho, al Estado le acaban de aparecer más de un millón de personas que, de acuerdo con sus propios registros, no entraban en las estadísticas.
Un número significativo que sigue consolidando la idea de que cada vez que damos un giro a la derecha, los pobres son cada vez más y cada vez más pobres y los dueños de casi todo son cada vez menos y tienen cada vez más.
Igual, para ponerle un poco de buena onda al comienzo del programa, tomamoos del PeronchoDelibery una crónica del censo, elaborada aún antes de que se conocieran las primeras cifras del mismo
Lo escuchamos a Emanuel Rodríguez.
Que cada vez que habla Alberto Fernández hay que esperar unos días para saber si lo que dijo es algo que consensuó con propios ministros y que responde a una estrategia sólida para consolidar el poder ejecutivo es ya una verdad de Perogrullo.
Por eso, vamos a esperar unos días para tratar de ver cómo se entender el pedido al Congreso de que aumente las retenciones a las exportaciones agropecuarias.
No olvidemos el detalle: el jefe de Estado efectuó el extraño anuncio luego de que el su propio ministro de economía dijera que el tema de las retenciones está cerrado y antes de que el ministro de Agricultura desmintiera tajantemente que el Ejecutivo tenga pensado mandar al Congreso un proyecto en tal sentido.
Ergo: uno entiende que el frente gobernante debe evitar pegarse a cada paso un tiro en los pies y que debería existir una estructura nacional que de inmediato (en realidad, desde hace ya tres años) trate de canalizar las distintas miradas en un plan consensuado que nos permita a todos ratificar el horizonte hacia el cual se marchó cuando se puso fin en las urnas al gobierno más corrupto y antinacional de la historia democrática argentina.
Pero no puede sino quedarse sin palabras cuando es el propio presidente el que anuncia medidas que ni siquiera sus principales colaboradores están dispuestos a llevar adelante.
En otras palabras, que la oposición, la prensa, la justicia y el poder económico son detestables es cierto. Pero que hacemos todo lo posible para que nadie se de cuenta, también…..